Zacatecas.- Con gran éxito se llevó a cabo el estreno, a través de las plataformas digitales, del documental La Infamia, el cual hace un recuento de la guerra sucia que enfrentó la familia Monreal Ávila, en especial los hermanos David y Cándido, así como de las afectaciones a su patrimonio e imagen pública tras la incursión de las fuerzas de seguridad en una de sus propiedades.
Luego de causar una gran expectación, el documental se puso a disposición de la población gracias a las redes sociales y las plataformas de internet este sábado 28 de noviembre.
Teniendo como escenario las tierras donde crecieron los hermanos Monreal Ávila, la obra recuerda su origen humilde; su niñez feliz, a pesar de la muerte de su madre; el respeto al trabajo y el amor al campo inculcados por su padre, Don Felipe. También destaca la unión, la camaradería y el afecto de todos los integrantes de la familia.
Basado en el reciente libro de Ricardo Monreal, La Infamia, el documental que lleva el mismo nombre presenta los testimonios de quienes resultaron afectados por la incautación de la planta deshidratadora de chile, en 2009, por una falsa acusación de nexos con el narcotráfico. Ello ocurrió en el marco del proceso electoral de 2010, en el que David se postularía como candidato a gobernador.
Se trató de una afrenta mediática orquestada desde el poder para vulnerar la imagen pública de David, quien desde entonces contaba con el respaldo social. Además, fue un ataque al patrimonio familiar, pues, como resultado de las indagaciones, la planta tratadora quedó desmantelada e inhabilitada durante casi una década.
Cándido Monreal recordó como a pesar del miedo ante las acusaciones y el hostigamiento a sus trabajadores, la familia dio la cara. El tiempo y la ley, les dieron la razón y pudieron demostrar que todo se trató de una falsa acusación, quedando un expediente limpio y la confianza en que la empresa se restablecerá.
Otros actores y analistas políticos también recuerdan que el proceso electoral 2009-2010 se caracterizó por la propaganda negra y la denostación contra David Monreal. Y a pesar de que nunca se presentaron pruebas por parte de los partidos políticos que lo acusaron, ya se había empañado la elección.
El impacto no sólo fue negativo en lo político, pues de acuerdo a las diferentes voces que intervienen a lo largo de la obra, toda la familia padeció por el engaño y la diatriba de quienes lanzaron estos señalamientos.
Sobre el documental, David Monreal dijo que éste se comparte en las plataformas digitales para que no se vuelva a engañar a la gente y para que no hagan titubear a los zacatecanos que quieren un cambio real para el estado.
Refirió que la guerra sucia en su contra no ha terminado; sin embargo, ahora la gente es más consciente y existen nuevas herramientas como las redes sociales que ayudan a no quedarse callados sino salir a debatir a la luz pública.
Agregó que la obra fue realizada por un equipo extraordinario y muy profesional, que logró transmitir cómo se construyó una infamia, cómo engañaron al pueblo de Zacatecas y cómo asustaron e inventaron una serie de calumnias, postergando una aspiración para transformar al estado.
David Monreal consideró que a la gente le consta que ha padecido lo vil y ruin de la política, y que quienes siguen con esa guerra sucia creen que lo lastiman sólo a él y a su familia, cuando en realidad han lastimado a toda la sociedad pues con su veneno, infamia y descalificación privaron hace unos años a Zacatecas del talento y la capacidad de mucha gente.
Por ello, plantea la urgencia de transformar a Zacatecas por medio del rescate del campo, con el encauzamiento de las zonas frijolera y lechera para potenciar la producción estatal; el impulso de la cultura y economía de cada uno de los municipios; apostar al deporte para generar más oportunidades para los niños y jóvenes, así como infraestructura para que las familias puedan vivir con más bienestar, entre otras políticas públicas que incidan en el desarrollo del estado.